Protección y analítica de datos
La variedad y la complejidad del tráfico de red actual hace que detectar ataques en la red requiera de tecnologías avanzadas de machine learning, que nos aportan la capacidad de clasificar y procesar los datos y su origen.
Además, el uso de múltiples aplicaciones y dispositivos requiere de una mayor vigilancia y control para la detección de comportamientos anómalos por parte de los usuarios. La inteligencia artificial y el uso del big data, aplicados a la ciberseguridad, nos permiten trabajar en patrones de comportamiento de tráfico y de usuarios, para la detección precoz de anomalías como fraudes, intrusos o fugas de información, de manera eficaz.
Nuestras soluciones realizan estas actividades de forma inteligente y autónoma, aprendiendo del funcionamiento de la red y los sistemas y estableciendo patrones válidos. Si se detecta algún comportamiento anómalo, que no corresponde con lo aprendido, inmediatamente lanza alertas de seguridad.